Hoy toca nueva reseña de parte de nuestro colaborador y amigo Gerar Ordoñez, quien se pone a analizar el ultimo disco de U.D.O., todos los detalles e impresiones a continuación
En la reseña anterior nos referíamos a la banda alemana Die Kreatur poniendo el eje en el control panóptico del Estado Alemán. En este caso nos referiremos en otro sentido al Estado Alemán. Esta vez de manos del ya clásico cantante del Heavy Metal, Udo.
Con 68 años Udo Dirkschneider (U.D.O) lanza su décimo séptimo álbum junto a la Sinfónica de la Bundeswehr: We are one. Un album épico y dionisíaco en el que se combina lo mejor del Heavy Metal clásico de Accept (Banda que UDO fundara a comienzos de los 80) y los arreglos orquestales de la sinfónica compuesta por 60 músicos bajo la dirección de Christoph Scheibling. Este disco de 15 temas logra una medida combinación del Rock más crudo de AC/DC y Judas Priest con arreglos clásicos que lo asemejan a bandas como Rhapsody e incluso que nos recuerda al glorioso guitarrista Yngwee Malmsteen. We are one pareciera ser el resultado de toda la historia alemana que ha sufrido múltiples guerras desgarradoras durante el S.XIX y XX con muchísimos conflictos internos para unificarse en un solo Estado – nación tanto en el SXIX con sus múltiples reinados como en el SXX con la guerra fría como última expresión bélica después de haber atravezado por el desgarramiento de la Segunda Guerra Mundial. Pero también pareciera representar la Unidad del Heavy Metal retomando todos los sonidos clásicos del metal de los 80 con los sonidos dionisíacos de una orquesta al mejor estilo épico de un Richard Wagner.
Los demonios atronan con este primer tema, Pandemonium: El pueblo elegido siempre enfrentado a los otros pueblos, la reunión de los demonios que azolan el pasado alemán resuena como un viejo fantasma que pretende enfrentarse a si mismo con todos sus demonios. Pero estos demonios adquieren la invisible forma de un virus, de una pandemia que esta vez azota al pueblo de todo el Globo Terrestre. Las naciones quedan desdibujadas en esta pandemia que golpea con fuerza los estrechos limites de los Estados. Es un tema a puro Accept con una firme orquesta dionisíaca que acompaña orgánicamente esta “declaración de guerra”.
We are one: con teclados que recuerdan al Rick Wakeman de 1984 (disco que homenajea al ya clásico libro de George Orwell) se inicia esta pieza del mejor metal pesado, un verdadero hit cuya música coral y estribillo no deja dudas que vino a marcar la diferencia en el mundo del metal, coreando a todo “viento” la unidad del género humano.
Love and sin: Los coros melódicos suenan, el telón se corre y la orquesta deslumbra in crescendo para dar paso a la violenta irrupción de las guitarras de Accept. Amor y pecado es un grito de espanto ante una sociedad colapsada por el funesto pecado del consumismo sin limites. Las voces femeninas a coro temen a un mundo sin futuro. Sin embargo los vientos soplan y Udo no retrocede, luces y fuego por doquier pero la lucha continúa.
Y entonces suceden las trompetas de caballería que llaman a dar batalla. Future is the reason why irrumpe con un ritmo de galope de caballos que cabalgan al frente de batalla por el derecho a un futuro propio, en esta épica batalla los coros y los teclados recuerdan a la serie Game of Thrones de George R. R. Martin, en el que la humanidad debe enfrentarse a monstruos poderosos y desconocidos.
Children of the world: Los niños del mundo están perdidos y confundidos, mientras se siguen peleando por un trozo de poder el cielo y el futuro de la humanidad se oscurece. Sin embargo Udo continúa su batalla por esclarecer algo de todo este caos advirtiendo que nuestro mayor enemigo está entre nosotros y se llama miedo. La sinfónica empieza a lucir todos los sonidos de su orquesta en esta épica batalla por el futuro de la humanidad, por los niños del mundo.
Blindfold (The last defender) una pregunta emana de las entrañas de esta guerra, ¿quién es la última línea de defensa?. Esta pregunta ronda en toda la canción en la voz de Manuela Markewitz, en tanto los tambores y las trompetas bélicas no dejan de sonar en una melancólica sinfonía que pretende fortalecerse en una batalla con final incierto.
Blackout: La sinfónica suena atronadora con múltiples sonidos apocalípticos que presajian futuras batallas en un cinematográfico fundido en negro…
Mother Earth: Udo arremete con un metal clásico, solo acompañado por trompetas y un coro que acompaña la ira de la madre tierra que consigue su revancha, recordandonos a la humanidad que cuando ella actúa los humanos tenemos muy poco que hacer. Un golpe mortal a nuestra soberbia.
Rebel Town: Sin embargo la lucha por el poder sigue carcomiendo a la humanidad con sus desigualdades sociales, y es en este orden de cosas en el que Udo en un atronador estribillo nos recuerda que la revolución es un rayo que despierta a todo pueblo rebelde y que toda rebelión implica sacrificios.
Natural Forces: La sinfónica de la Bundeswehr aparece con todas sus fuerzas naturales para introducirnos en un épico tema con aristas de batallas medievales en los que los violines soplan, los vientos truenan y los coros alientan y templan para las próximas batallas.
Neon Diamond: Y pasamos a uno de los temas más clásicamente de los 80, con sintetizadores, bajos y batería muy típico de esa década. Udo y Manuela jugando sus voces en contrapunto logran desplegar todo su rango vocal, mostrando la versatilidad de Udo como ex miembro de Accept.
Beyond Gravity: La sinfónica vuelve a irrumpir recordandonos que el futuro es nuestra razón, con gaitas escocesas que nos recuerdan a las épicas batallas por la independencia, en este lapsus sinfónico las guitarras eléctricas se entremezclan con los atronadores tambores bélicos. Manuela Markewitz inicia el coro para arengar la tropa. La guerra se aproxima a su final, con pocas certezas y muchas incertidumbres.
Here we go again: Y entonces Udo sale al ataque con un metal pesado con trompetas que le dan un tono de blues de garage a los Memphis la blusera o La Mississippi, con algunos leves beats tipicos del rap. Udo sale a la batalla con otros aliados musicales.
We strike back: ahora toda la banda de Udo sale en un agresivo contraataque, esta batalla es decisiva, en cada compás se juega la vida y no pareciera haber respiro. El heavy metal de Udo aparece fuerte y en todo su resplandor para mostrar que todavia está vivo y respira.
Beyond good and evil: Y así llegamos al final de este dionisiaco disco, de esta epopeya, de esta épica guerra que aún no termina de terminar. Udo se debate entre el bien y el mal. ¿Podrá trascender esos limites de la moral? ¿Podrá trascenderse a sí mismo? La sinfonía suena en estos interrogantes que como en un rítmico james bond trata de descubrir la respuesta con final abierto.
Que lo disfruten.